Se cumplió la profecía de Julio Rugel

Publicado  lunes, 7 de julio de 2008

Por: Ramón Morales Verduga

Email: moralesverdugaramon@gmail.com

Se cumplió la profecía de Julio Rugel

Antes que nada, quería dedicar este escrito al gran amigo, Julio Rugel, barcelonista a cien por cien, pero que apoyó como buen ecuatoriano a Liga de Quito, en la final frente al Fluminense. Recuerdo su trillada frase aquel 2 de julio del 2008: “Cevallos va a ser campeón de América”. Lo repetía constantemente. Y vaya que su deseo se cumplióLos pronósticos se dan muy pocas veces en el fútbol y que satisfacción que se haya dado para Liga de Quito, el actual monarca de América. Gritos de júbilo y complacencia se vivieron en todo el Ecuador por este hecho histórico.

Liga ha ganado por fútbol y por personalidad futbolística demostrada a lo largo de toda la competición sudamericana. Es así de sencillo. La gloria deportiva la saborean pocos equipos y el cuadro merengue lo ha palpitado desde hace una década. Tuvieron como base fundamental el compromiso serio, la organización constante y la sabiduría de pegar en el momento justo. Los albos cambiaron la mediocridad deportiva a nivel de clubes y enmudecieron el pensamiento insignificante de algunos que se sintieron ganadores por tan sólo conseguir vice campeonatos de América en su momento.

Fue un partido épico para José Francisco Cevallos. Las revanchas deportivas siempre están a la vuelta de la esquina y Pancho confirmó que es el mejor arquero ecuatoriano de todos los tiempos. Un equipo con una velocidad endemoniada, física y mentalmente. Vivacidad de transformación en espacios cortos y contundencia cuando llegaron al área rival.

Hay que acordarse de hombres como Campos, Calle, Araujo (el más regular de todos), Ambrossi, Manzo, Urrutia, Guerrón, Bolaños, Obregón; entre otros, cuya labor ha sido espléndida desde todo punto de vista. El Robbin Hood del ámbito dirigencial, ha sido el emblemático Rodrigo Paz, quien junto a su hijo, Esteban, magnificaron la idea de trabajar mediante procesos a largo plazo, donde la sapiencia de un líder técnico como Patón Bauza evidenció la casta ganadora del elenco blanco.

El fútbol es un deporte de detalles y de vivencias instantáneas. Por fin Liga de Quito consiguió lo que para muchos fue un sueño inconcluso. Los azucenas demostraron estar por encima del azar. Hoy, el fútbol ecuatoriano, se inscribió en el libro de los campeones de América. Durante muchos años nos sentaremos en el cielo del éxito y desde allí no bajaremos en algún tiempo. El mundial de clubes los espera en Japón. No sería casualidad de jugar la final contra el Manchester United…