CHAU SUDÁFRICA 2010

El dolor de la no clasificación a Sudáfrica 2010 no les cicatriza a algunos hinchas ecuatorianos. No podemos dejar de ser ilusos al momento de analizar las causas del porqué perdimos el boleto a nuestro tercer mundial consecutivo, especialmente jugando en condición de local, donde se perdieron puntos importantes.

El primer factor y que resalta como una de las problemáticas en el fútbol tricolor a nivel de la selección mayor en este 2009, radicó en la falta de empuje ofensivo que no pregonó en el equipo conducido por Sixto Vizuete. Nos acostumbramos a pensar que el ex goleador de las eliminatorias hacia el mundial de Alemania 2006, Agustín Delgado, nos iba a durar veinte años más. De sueños vivimos todos en esta vida. Sin embargo, no podemos huir a una realidad que nos terminó aniquilando durante toda la fase eliminatoria: “FALTÓ UN GOLEADOR DE RAZA Y ENVERGADURA QUE ANIDE LAS REDES CONTRARIAS”. Ni Cristian Benítez, Felipe Caicedo, Carlos Tenorio; entre otros delanteros que tuvieron su oportunidad, jamás supieron sobresalir en el área de los equipos a los que enfrentamos en la altura de Quito o en condición de visitante.

¿Qué podemos dar a entender con esto? De que así tengamos 100 futbolistas en el exterior; mientras éstos últimos no tengan la regularidad frecuente en sus respectivos clubes, no sirve de nada exportar. Únicamente quien perdió fue Ecuador. Por la falta de contundencia ofensiva y las distracciones defensivas, perdimos puntos trascendentales en casa. Con Paraguay se empató 1-1, con Brasil por idéntico marcador; y los acabos finales fue contra los uruguayos, donde el sueño de estar en el tercer mundial consecutivo de la historia se truncó, al caer por 2-1.

A todo lo anteriormente mencionado, sumémosle el paupérrimo y mediocre torneo ecuatoriano de fútbol, en donde siempre tienen que ver los benditos dirigentes de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), quienes cada año revuelven sus neuronas cerebrales por hacerse líos complejos con el sistema que según ellos es el propicio. ¡Señoorreeees!... Aprendan que el grado de competencia en un campeonato nacional no se da por lo complejo o extenso que sea el mismo. La competencia va de manifiesto por la regularidad y partidos ganados dentro de cada partido, se jueguen los mismos de local o visitante. En Argentina, Chile, Colombia, Perú, Bolivia, Brasil y Paraguay, se desarrollan los famosos campeonatos aperturas y clausuras. La competencia entre los equipos se siente y se evidencia de principio a fin, donde el que campeona es el que se lleva los réditos reconocibles de los trabajado del año.

Ojalá y con esta experiencia se aprenda. Esta vez volveremos a ver un mundial sin Ecuador. Tuvimos dos años de sueños y glorias. En este 2009, retrocedimos el tiempo y caímos en el charco que nos había castigado durante 60 años. No obstante, la quimera de estar en el mundial del 2014 está pendiente. Los replanteamientos son urgentes. El tiempo no espera….(RMV)