Será un partido muy táctico. De entrenadores que se conocen a la perfección y que no se han sacado máximas ventajas en sus enfrentamientos. Pablo Repetto le ganó a Fabián Bustos la final de la Copa Ecuador 2019 y, en aquella temporada el argentino (Bustos) le ganó al uruguayo la final de la Liga Pro. En la primera hubo goles y la segunda partida, se definió por penales.
En este 2020 hay una ligera ventaja del estratega charrúa (Repetto). No perdió en el Monumental ningún partido. En Casa Blanca, ganó en la primera etapa del torneo (2x1). Este domingo se jugará el invicto y una revancha especial por lo sucedido en diciembre pasado cuando Delfín SC se alzó por el título.
Los pequeños detalles marcarán diferencias en este encuentro final. Las individualidades perfectas de jugadores que se involucren con las necesidades de sus equipos, apaciguarán las preocupaciones. Por ejemplo, si en Barcelona SC no aparece en su afán colectivo, deberá sacar la varita mágica, Damián Díaz. En Liga de Quito, que hizo mejor las cosas en la ida, deberá apelar a la velocidad y dinámica por los costados. Pero, sobre todo, al nivel de pensamiento de sus volantes de circulación y de los dos ofensivos: Junior Sornoza y Cristhian Martínez Borja.
Olvídense de los números y consistencias futbolísticas a lo largo de este año. Eso en el partido final queda en segundo plano. Puede ser un análisis que nos sirve a todos en la previa del duelo, pero eso no marca una diferencia al momento del resultado. En la ida que se jugó la semana pasada en el Monumental, a muchos nos sorprendió el nivel de Jordy Alcívar o Kunty Caicedo, quienes no habían sido regulares en la temporada. Eso es un argumento claro, que el punto de inflexión siempre estará en la propuesta individual de cada uno. Agárrense del asiento, nervios de acero y tranquilidad para el hincha en esta final. El fútbol trae de todo. El favoritismo nunca gana en su totalidad. Las sorpresas pueden estar a la orden del día. Disfruten del Liga vs Barcelona SC.
