LA PULGA DE ORO, EL MEJOR DEL 2010

No queda dudas de que Lionel Messi es el mejor del mundo. ¿Qué otro adjetivo le podríamos ubicar a la pulga? Leo las notas periodísticas a nivel del mundo y muchos concuerdan con las que usted y yo pensamos. ¿Para qué decirlas? Ya sabemos que tiene la posee versatilidad, rapidez, marca la diferencia, combinación de celeridad física y mental. Pero sobre todo una que enmaraña todo lo simple de un verdadero jugador de fútbol: “LA CALIDAD EN DEFINICIÓN”.

Las perspectivas no se pierden. Seguirá dando lo suyo, mientras su equipo, el FC Barcelona, se acople a su vistoso juego. Teniendo a Iniesta o Xavi, quienes estaban entre los opcionados a ganar el balón de oro, la magia de la fascinación deslumbrará en el aspecto deportivo.

Luego de la designación de de Lionel Messi, como mejor jugador del mundo, que tomó de sorpresas a muchos, un televidente del programa deportivo que dirijo a diario, me envió un correo electrónico en el que mostraba su desacuerdo con la elección. Me preguntaba: ¿Qué ganó Messi en el 2010? ¿Acaso no basta con el campeonato del mundo obtenido con la selección española por parte de Iniesta y Xavi, para haber obtenido el premio de los mejores del 2010? En fin, las preguntas iban y venían. Quizás tenga razón en su análisis el hincha del fútbol, y enseguida se me vino a la mente el titular de diario MARCA: “MESSI DEJÓ SIN BALÓN DE ORO A ESPAÑA”. Cada quien tendrá su reflexión, lo que sí es cierto es que el premio en el Palacio de Congresos de Zúrich, y con voz de Pep Guardiola en la premiación, fue para Sudamérica.

En cuanto al premio del mejor DT en el 2010 y que quedó en manos de José Mourinho, sin lugar a dudas no queda reproche con lo efectuado con el Inter de Milán en la pasada temporada y por supuesto con el triplete obtenido con el elenco italiano: Champions League, Copa y Liga de Italia. Lo único que recordará el famoso Mou será que no pudo vencer a PEP en el clásico español: EL 5X0 jamás sanará la herida, por más premio que se gané. En enero de 2012, se verá quién ganará el Balón de Oro de 2011. Hasta ese día señores…. (RMV)

2011: UN AÑO DE ESPERANZA

El inicio de un nuevo año implica mucha reflexión y sobre todo, cuantiosas ganas de transformación en el ser humano. Es así de sencillo. El autor José Enrique Rodó, manifestó en uno de sus enunciados: "La costumbre es el enemigo del hombre; renovarse en lo mutable es el secreto de una vida plena." ¡Fantástico!.
Conversando en la reunión de diciembre pasado, con algunos ex compañeros del colegio Cristo Rey, en donde a propósito celebramos diez años de graduados; la totalidad coincidimos en los cambios de esta último década. Esas llamadas permutaciones que han ido desde la falta de educación del estudiante de hoy, hasta la facilidad con la que la tecnología llega hasta sus hogares; y que en algunos casos, aquello no se robustece con el verdadero conocimiento. Es decir, no siempre la facilidad del internet o la actualización tecnológica, te brinda el suficiente conocimiento. La falta de la práctica en algunos casos termina por engañar al verdadero profesional. Es como el periodista. Si no estás en el lugar de los hechos, no puedes recolectar, elaborar y publicar la información.
El 2010 envolvió un tiempo de reflexión para algunas personas que se detuvieron un momento en sus vidas para hacer un recuento de los aciertos y errores que cometieron (para la totalidad el tiempo de meditación es fugaz). Otros, demostraron su gratitud o pidieron perdón. Sin embargo, para la mayoría el final de un año es sinónimo de vacaciones o simplemente una ocasión más para dar rienda suelta a los excesos y celebraciones en las que nunca faltan: Alcohol, comida y la famosa bohemia. Los abrazos y deseos para un venturos 2011 no se alejaron de los exteriorizados saludos. ¿Qué costumbristas somos no? Me he podido fijar con el transcurso de los años, que las personas magnifican los deseos de fe y esperanza hacia los demás cuando cada año está por finalizar. Pregunto. ¿Por qué no pueden ser los 365 días del año, donde existan esos deseos de paz, felicidad y de verdadero amor hacia el prójimo (que para mí no existe). ¿Por qué esperar la navidad o el fin de año? Es como el ejemplo de los famosos políticos: Cada año prometen, hablan, vociferan y no cumplen. Y en Manabí la lista es larga. Es un mal sin remedio.
Nunca será tarde para buscar un mundo mejor y diferente, si en el empeño colocamos coraje y esperanza. Por ende, ya sabemos de antemano que la vida es muy corta, y cada momento tiene su valor. Pero erróneamente, nos pasamos días enteros dormitando y años completos soñando. Como dijo algún sabio: “La riqueza de un humano se mide por la cantidad y calidad de sus amigos que tiene. Gracias por hacerme millonario. Feliz Año Nuevo.”… Por si acaso. No espero la finalización del año para decirlo… (RMV)