DICOTOMÍA DE VIDA

Publicado  viernes, 14 de noviembre de 2008

Para usted apreciado lector, en estos tiempos de vísperas navideñas y de regocijo familiar se ha propuesto enmendar errores y edificar algún estímulo de vida mucho mejor para el año entrante.

En algún momento, le ha llegado hasta su memoria la típica consulta del ser humano basada en su nivel de autoconocimiento y la cantidad de metas cumplidas a lo largo de la vida y de cada año que transcurre. Por ejemplo: ¿Qué espero de mí?, ¿Cuándo cumpliré mis metas?, ¿He aprendido a conocerme a mí mismo a través de todos aquellos quienes me rodean?. Faltarían muchas preguntas y al mismo tiempo un análisis exhaustivo de las respuestas.

El año 2008 pasó y se esfumó en el recuerdo de temas que afectaron al mundo y exclusivamente al Ecuador, tanto en lo social- económico, político (lo más detestable desde todo punto de vista) y lo deportivo (nos alegraron el fútbol y atletismo). Cada periodo de vida pasa sin remordimiento y te deja un sabor dulce y amargo, a medida que conseguiste las metas anheladas. Recuerdas algo del pasado y te das cuenta que el ayer fue un trayecto de vida que disfrutaste y que el hoy es el presente que hay que forjar y cuidar para que los preceptos de supervivencia se cumplan sin contratiempos.

Actualmente vivimos en una sociedad tan descomunal, donde la falta de valores morales y la deshonestidad enigmática, transgreden la concepción de los que necesitan de compañía, apoyo, ayuda, solidaridad y más que todo, de un toque mágico y venerable de auténtica devoción amistosa. Por ejemplo, ¿Qué significado tiene para usted la amistad? ¿Acaso su mejor camarada es quién conforma las engañosas e insignificantes familias, que dicen ser felices por tener cuentas adineradas o por vanagloriarse de lo que el otro no pudo tener?, ¿Quizás su mejor amigo es quién, por miedo, no expresa las cosas como deben ser? No soy ideológico, ni filósófico. Peor aún me considero historiador. Soy humano como todos, quizás con más defectos que virtudes, pero en fin, compasivo y comprensible.

Paulo Coelho, escritor brasileño, señala en uno de sus libros que “la mayor riqueza que un hombre puede poseer, lo más valiosa por encima de todas las cosas, es la amistad. Esta por lo general, no surge de la noche a la mañana, pues tener un amigo(a) es el resultado de una paciente y respetuosa actitud ante la vida, donde previamente se desarrollan una serie de virtudes personales que hacen de una persona digna y generosa, capaz de darse a los demás de manera incondicional y sobre todo, con lealtad a toda prueba”. Al buen entendedor, pocas palabras. Ser leal presupone ser persona de palabra, que responda con fidelidad a los compromisos que la amistad lleva consigo. El 2009 nos espera y cada año pasará tan rápido que el simple hecho de vivirlo es un regalo de Dios…Aprendamos a descifrarlo…(RMV)