QUÉ INGRATO QUE ES EL FÚTBOL…

Publicado  martes, 7 de febrero de 2012

Comparto con mis queridos seguidores este artículo escrito por un abogado de profesión que es netamente portovejense. Ama al fútbol como a la vida misma. Disfruten y reflexionen, los verdaderos hinchas del fútbol, especialmente los que se dicen serlo.. Saludos



Por: Pepe Migue Mosquera
Email: pepemiguel10@hotmail.com

QUÉ INGRATO QUE ES EL FÚTBOL…

Se dice que el fútbol es el rey de los deportes. La pasión de multitudes. Sin embargo, lo que muchos callan, es que el fútbol en la misma medida que da felicidad y alegría a muchos. En varios casos causa preocupación y zozobra a un reducido grupo que paradójicamente son quienes representan la base de este deporte.

Y es que sorprende que jugada la primera fecha de la Serie “A” del fútbol profesional ecuatoriano, el promedio de asistencia en los estadios sea de 5.000 personas (a excepción del Monumental de Barcelona que multiplicó por 8 este promedio) a pesar de la supuesta expectativa de los aficionados sobre el inicio del torneo, las contrataciones de sus clubes, el diseño de las camisetas y demás novedades.

Esto ratifica que nuestra cultura, en todos los ámbitos, es la de exigir pero nada aportar. Tenemos la alevosía de exigir que “nuestro club” contrate los mejores jugadores más aun si se trata de extranjeros, cuentas claras en los presupuestos, rebaja en los precios de las entradas, promociones de 2x1, proponer el día y hora que más nos convenga para el partido, pero al final la historia sigue siendo la misma: estadios semivacíos cuyo eco agranda la soledad de una programación costosa.

El fútbol para ser una pasión se compone de varios elementos como estadio, equipos, jugadores, dirigentes, presupuesto, pero también de hinchada. Imaginen el ánimo de un futbolista al entrar a un campo de juego con gradas vacías donde las órdenes de su técnico se escuchan hasta las cabinas; sería casi como imaginar el ánimo de un locutor al transmitir sabiendo que no hay luz en la ciudad y que su trabajo será escuchado por pocos.

La modernización ha llegado el fútbol, y como todo exceso en la vida es malo, ha convertido a muchos en “hinchas virtuales”: compradores compulsivos del PPV, fanáticos de las incidencias en la web, o furtivos seguidores de comentarios en el twitter. Sin embargo, la comodidad del hogar o del bar, no reemplaza la sensación de compartir alegrías o tristezas en un estadio acompañado de miles de personas que sin conocerlas, en pocos minutos se convertirán en amigos de toda la vida por coincidir los colores del equipo que se ama. No dejemos que este fútbol virtual nos arranque las costumbres que nos llevaron a querer a este deporte como algo más que un hobbie; que no sea el caso de la ortografía destruida por un mensaje de texto, de cambiar la lectura por ver una película, dejar de escribir por llamar, de la desaparición de las disqueras por el MP3.

Es cierto que la taquilla no representa más allá de un 30% del presupuesto de cualquier club, pero no podemos negar que la magia del fútbol existe por la fiesta que se vive en el estadio, por los preparativos para llegar allá, por la celebración posterior.

Nos quedan dos opciones: dejarnos llevar por la tecnología y la comodidad, o mantener la llama que hace que el fútbol sea el deporte más seguido en el mundo… Personalmente, me comprometo por la última.